Dark Angel: Ángel de la muerte (1990). Dolph Lundgren

Detalles: Categoría de nivel principal o raíz: Películas; Categoría: Análisis; Publicado: Jueves, 22 Mayo 2014 18:34; Escrito por Emilio Iglesias

Dolph Lundgren salvando al mundo. Acaba de nacer un nuevo género: El friki-pulp. Con esta película descubrirás el arma alienígena tecnológicamente más avanzada de la historia: un cede.

Para hablar de películas pulp es necesaria una extensión del concepto, y lo más importante, en base a una serie de principios no escritos. A veces resulta difícil justificar el análisis de una película bajo este punto de vista, y aunque ya hemos dicho en varias ocasiones que el cine de los ochenta es una evidente reinvención del concepto pulp llevado a la gran pantalla, y sobre todo a los videoclubs: Historias de videoclub (I). Pelis de acción, años 80, muchas de estas pelis son un delirio tal, que uno no sabe muy bien dónde termina el concepto, y dónde comienza a funcionar la friki turbomix de esta singular década. Este es el caso de Dark Angel, un título que llevo años buscándolo, pero que precisamente por no ser capaz de recordarlo, nunca hasta ahora logré dar con él. Hablamos de una película de ciencia ficción ochentera, una de esas en las que el planeta Tierra se ve amenazado por un alienígena malísimo, pero que por fortuna trae pegado a su estela un poli bueno, también de otro planeta, y dipuesto a colaborar con las autoridades locales (Dolph Lundgren). Sin embargo, Dark Angel es diferente a todas las demás, pues desde un punto de vista más o menos serio, nos mete un guión que yo catalogaría, con permiso del respetable, de friki-pulp. Y no me pidáis que defina esto, porque como todos sabemos, el concepto, es el concepto.

Dark Angel la vi cuando era joven y llevaba años tratando de volver a verla, pero no me acordaba del título. Lo único que recordaba de ella es que en su día me había impactado bastante, que me había gustado, y que la trama iba de dos extraterrestres, uno malo, y otro bueno, haciendo de las suyas. Y como no, de uno de los detalles más frikis en la historia del armamento, armas sci-fi (sci-fi weapons): un lanzador de cedes. Sí, habéis leído bien. El tipo chungo asesina a sus víctimas degollándolas con un cede arrojadizo (no sabemos si de música heavy, clásica, o las últimas novedades de El Fary). Con solo estos datos no me resultaba fácil encontrar la película, que además es poco conocida. Sin embargo, y como suele suceder en estos casos, repasando la filmografía de Dolph Lundgren, con motivo de Mercenarios 3, la encontré, sin buscarla.

Sí, Dolph Lundgren es el protagonista de Dark Angel, aunque yo no lo recordaba; y no lo hace nada mal, la verdad. Este gigantón, que vimos por primera vez en Rocky IV (1985), y que logró la fama con su primer papel protagonista en la entrañable Masters del Universo (1987) —a ver cuándo hacen el remake; me extraña mucho que a estas alturas aún no se hayan decidido—, interpreta a un detective de homicidios de Houston, honrado, y con principios, pero que está harto de su departamento y de cómo se hacen las cosas. Su vida dará un vuelco cuando comienza a investigar unos extraños crímenes relacionados con el narcotráfico, tarea para la cual le asignan un nuevo compañero. A partir de ahí la retahíla de tópicos entorno a lo que se podría catalogar como buddy film fantástico policial, es un no parar. Es como si al guionista de Arma Letal (1987) le dijesen que reescribiese el guión después de tomarse una buena dosis de LSD, porque el resultado es de traca.

Todo en esta película es un delirio absoluto. Si no fuera porque se toma en serio a sí misma desde que empieza hasta que termina, diría que es una parodia de género, pero no lo es. Y la verdad, creo que ahí está el encanto, porque vista hoy en día, debo reconocer que me ha resultado muy entretenida. Lo tiene todo, desde el momento pulp ¿a qué nos enfrentamos?, pasando por las explicaciones científicas que te dejan con cara de bobo. Lo de matar a las víctimas con un cede (compact disc), teniendo en cuenta que el asesino es un alienígena capaz de cruzar toda la galaxia a los mandos de su nave espacial, y cuya tecnología armamentística se supone mil veces superior a la nuestra, es algo inclasificable. No creo que exista comparación alguna si revisamos las armas que se han usado en la historia del cine de ciencia ficción. Artículo relacionado: Las 10 mejores armas pulp, por Eihir. Pero no solo eso, sino que además, las motivaciones del extraterrestre para venir a nuestro planeta, y matar humanos, son, si cabe, todavía más esperpénticas. No diré nada sobre ello, que no quiero desvelar la sorpresa.

Aunque Dark Angel data de 1990 yo la considero de los ochenta, creo que es lo justo. En esta década hubo muchas películas que explotaron la temática de polis y cacos alienígenas que, por el motivo que sea, terminan la persecución en nuestro planeta. Desde la mítica Hidden (1987), que para mí es una de las mejores películas de ciencia ficción policial de la historia, hasta otras de bajo presupuesto pero bastante interesantes como Pacemaker: El ángel destructor (1990) -muy dificil no confudir esta película con la que estamos comentando por similitud de título y año-, pasando por una estrafalaría pero divertidísima reinterpretación del género, como Critters (1986), una saga en sí misma, hasta la presente Dark Angel. Todas ellas beben de la misma fuente, y todas a su manera, son un puntazo.

Dark Angel: Ángel De La Muerte, tiene diferentes títulos según cada país. El título original es I COME IN PEACE (Vengo en son de paz), que son las únicas palabras que repite una y otra vez el alienígena, un imponente Matthias Hues, secundarío habitual en las producciones de serie b. Otros títulos son Lethal Contact, El Ángel Oscuro, El Destructor Mortal, etc. Su director Craig R. Baxley, venía de rodar Acción Jackson (1988), y tras el título que ahora presentamos, siguió con otro de acción y músculos, Frio como el Acero (1991). Estas fueron sus tres grandes películas. Después, poca cosa.

>FICHA IMDB (Fuente Imágenes): Dark Angel (1990)

Lo mejor: El guión es tan absurdo que resulta divertidísimo, muy entretenido. Tópicos, música ochentera, y una buena actuación de Dolph Lundgren. A pesar de los años sigue siendo visible a día de hoy.

Lo peor: Nada que destacar. La película es mala, si aceptas esto desde un principio, es muy probable que te guste.

Veredicto: Échale un vistazo, no te arrepentirás, y descubrirás un nuevo género cinematográfico: El Friki-Pulp.