A estas alturas todo el mundo sabe quién es Edgar Allan Poe, maestro de la literatura universal que nos dejó un buen puñado de obras inolvidables, la mayoría de ellas bajo la forma de relato corto de terror gótico. Muchos especialistas de la historia literaria le atribuyen dos méritos muy notables: que fue el primer escritor en intentar vivir solamente de su obra, y que fue el creador del género literario de los detectives investigadores. Pero entrar a debatir este asunto exigiría un artículo demasiado extenso, al igual que enumerar la obra, vida y milagros de este autor archiconocido, así que nos limitaremos (al menos hoy) a centrarnos en tres de sus relatos más importantes (y más veces adaptados al cine): Los Crímenes de la Calle Morgue, El Gato Negro, y El Cuervo.
«Atención: Spoilers». Algo tiene de especial esta serie The Walking Dead que ya va por la sexta temporada y, apesar de repetir la misma fórmula una y otra vez, hasta la absoluta saciedad, y donde los zombies ya ni importan, ni tienen protagonismo alguno, sigue enganchando a todos los aficionados capítulo tras capítulo. Probablemente el secreto del éxito radique en su habilidad para manejar lo que se conoce como: Cliffhangers, o lo que es lo mismo, dejar colgado al espectador, obligándolo a ver el siguiente capítulo si quiere conocer el desenlace a una situación terrible o angustiosa, planteada siempre en el último minuto. Dicha fórmula tiene su máximo exponente en la presente temporada, la sexta, cuyo final es uno de esos memorables y que hacen correr ríos de tinta electrónica por toda la red. En este final conocimos al nuevo súper villano, al malo malísimo, llamado Negan, y cuya primera acción fue la de “cargarse” a uno de los personajes intocables, a uno de los que siguen la acción más o menos desde el principio. Aquí la pregunta es ¿a quién?; ¿a quién mata Negan? A continuación, algunas pistas.
He decidido escribir este artículo a partir de mi propia experiencia, que no sé si llamarlo review, tutorial o, simplemente, un ejercicio de opinión. Como muchos de vosotros ya sabréis, somos una editorial humilde, a veces demasiado, y por lo tanto de escasos o nulos recursos, pero eso no nos impide en modo alguno dar rienda suelta a todos nuestros procesos creativos, que son muchos y variados, como se puede comprobar. Hasta la fecha únicamente nos dedicábamos a las publicaciones digitales (eBooks), pero tras el hackeo sufrido en la web, del que ya dimos buena cuenta hace algunas semanas, y que a punto estuvo de hacer que desapareciésemos, he reflexionado; y he decidido tomar un cambio de dirección. ¡Lo imprimiremos todo! Con tiempo y paciencia, claro está, pero no quiero dejar este mundo sin antes colocar copias impresas de nuestras obras en diferentes bibliotecas, bares, cines, discotecas, salones recreativos, y hasta en el Corte Inglés —para esto tendré que urdir un plan maestro y, sin que nadie se dé cuenta, sacar los libros de una mochila y colocarlos por los estantes, a hurtadillas; de lo contrario lo veo entre difícil e imposible—; así quedará constancia física de todo nuestro trabajo. La idea no suena mal, el problema es ponerse manos a la obra y, tras darle muchas vueltas a las diferentes opciones, hemos elegido «CreateSpace», el servicio de impresión bajo demanda de Amazon y, en las lineas que siguen, como complemento al post que en su día publicamos en nuestros foros: Como publicar en CreateSpace de Amazon, y al cual os remitimos si queréis plantear dudas o necesitáis consejo (los foros son más útiles que los sistemas de comentarios de los artículos), dejamos constancia de nuestra «experiencia».
En el último artículo que escribí, que trataba sobre el tema de las Casas Encantadas, ya cité una película de la productora Amicus titulada La Mansión de los Crímenes. Es una peli de relatos, donde el segundo de ellos trataba sobre un individuo que visitaba un museo de cera donde una de las esculturas tenía un parecido asombroso con una mujer que conocía. Pues bien, en este artículo vamos a hablar de este tema en concreto. Dentro de las historias de terror, el mundo de los museos de cera constituye uno de los subgéneros más amados (y explotados) por todos. ¿Acaso no resulta inquietante contemplar efigies en extremo parecidas a nosotros, con esos rostros brillantes y pulidos, que normalmente representan afamados iconos del terror? Salas mal iluminadas, llenas de estatuas cerúleas inmóviles, donde reina un ambiente siniestro en cuyos rincones oscuros acechan ocultos a nuestros ojos los asesinos más retorcidos que cabría imaginar. ¿O tal vez el asesino es una de las esculturas de cera, disimulando mientras vigila cada uno de nuestros movimientos a la espera de asestar el golpe definitivo cuando menos lo sospechamos? Bienvenidos al horror de lo que se oculta en…¡los Museos de Cera!
Olga Mesmer es una de las primeras superheroínas del pulp, y una de las más destacadas; aunque debo reconocer que, por la parte que me toca, no tenía ni la menor idea de su existencia. El caso es que llevo un tiempo buscando información acerca de mujeres con súper poderes de la era dorada pulp, y a ser posible, ya sea de forma directa o indirecta, que no tuviesen relación alguna con los personajes que todos conocemos y tan afines a Hollywood, ya sea la Mujer Maravilla, BatGirl, CatWoman o SuperGirl; demasiado conocidas para mi propósito —buscar inspiración para una nueva historia que tengo en mente—. Rebuscando en la esencia primaria del pulp es donde uno se encuentra las cosas más fascinantes, y a poco que rasques saltan nombres como Fantomach; Domino Lady; The Woman In Red; Lady Satan; Mother Hubbard; The Spider Queen, o la que ahora nos ocupa, «Olga Mesmer», solo por citar algunos nombres a modo de ejemplo.
Novelas y películas de casas encantandas, ¿por qué nos gustan tanto? Mansiones embrujadas que se alzan en la noche, puertas que se abren y se cierran de forma misteriosa, ruidos inquietantes, espíritus siniestros que rondan de habitación en habitación perturbando la paz de los inquilinos, fenómenos extraños que nadie puede explicar… Lugares como el 112 de Ocean Avenue (Amityville), la Mansión Winchester en San José (California), o la Casa del Consejo de Brimsdown en Enfield (Inglaterra), son solo algunos ejemplos de moradas donde actúan fuerzas desconocidas, ya sean fantasmas, maldiciones o poltergeists. Las casas encantadas conforman uno de los temas más apasionantes tanto en la literatura como en el cine y la televisión, evolucionando desde los primeros relatos góticos del siglo XVIII (empezando por El Castillo de Otranto de Horace Walpole, que inició el género), pasando por los inicios del terror moderno (como La Caída de la Casa Usher, de Edgar Allan Poe) hasta las películas de hoy en día como La Cumbre Escarlata (Guillermo del Toro, 2015). Y aunque en principio uno pudiera pensar que todas las obras ubicadas dentro de este amplio género debieran ser muy parecidas entre sí, esto no ocurre en absoluto, pues cada historia se desarrolla en base a factores completamente diferentes (presencia de fantasmas, crímenes violentos, dramas personales, fenómenos paranormales que al final son simplemente trucos, espiritismo, vudú, etc). Y a pesar de tales diferencias, todas estas historias tienen un elemento común que las une, que no es otro que el auténtico protagonista: la casa (que en función del relato puede variar en hotel, mansión gótica, manicomio, hospital abandonado e incluso una pequeña cabaña perdida en un inmenso bosque siniestro).
Para muchos de vosotros no necesita presentación, pues Vidal Fernández Solano, además de escritor, es uno de nuestros colaboradores habituales y al que seguro ya habréis leido en más de una ocasión. Ahora, y tomando un poco como excusa la presentación de su último libro «Ecos de gente muerta, y otros relatos», le haremos algunas preguntas a modo de entrevista, y así saber un poco más sobre él. Respecto al libro, decir que se trata de una novela corta de terror y que, además, se acompaña de cinco relatos independientes, todos ellos de terror y fantasía. Estos cinco relatos llevan por título: La casa de al lado (una historia de fantasmas); Encargo especial (mafias y elementos sobrenaturales); Haga realidad sus sueños (fantasía terror tipo steampunk); The beast 2.0 (fantasía especulativa gótica); y Daemoniaca possessio (un relato de posesión en las montañas del norte de España). Pasemos a las preguntas y que sea el propio autor quien nos hable de todo esto.